Error 404

Busqué tu nombre en mi historia, 
pero la página no cargó. 
Intenté entrar
pero el vínculo estaba roto
Desde antes de empezar.

Te escribí poemas
con el alma lista para compartir
pero tú… 
Tú no tenías red,
ni intensión de conectarte.

Me conecté mil veces, 
reinicié la fe, 
actualicé mis ganas, 
y aún así, 
seguías sin aparecer.

No fue falta de señal, 
fue falta de intención. 
No fue que no te entendiera, 
fue que nunca hablaste mi idioma.

Así que cerré la pestaña, 
borré las cookies, 
limpié el historial. 
No por rencor, 
sino por respeto a mi espacio.

Porque el amor que no se da 
no merece quedarse en la memoria. 
Y tú, fuiste solo eso: 
un intento fallido, 
un archivo perdido, 
un amor que nunca respondió.

Compartir:

Comparte en tus redes sociales.