Así nace este poema, huérfano de amor;
Busca un lugar para mantenerse.
Así ve la luz este poema, apenas,
Buscar un corazón al cual aferrarse.
Este poema tiene miedo de perder,
Tiene miedo de morir antes del primer suspiro,
Tiene ganas de llegar a tus ojos y latir;
Este poema quiere existir, vivir.
Este poema precisa tus manos,
Anhela un pellizco de nervios,
Quiere un apretón de nudos,
Y así, de tu mano, conquistar mundos.
Este poema busca tu pelo,
Para bailar mientras lo peinas,
Desea ser libre cuando lo dejas al viento,
Este poema tendría el perfume de tu pelo.
Sigue huérfano, quiere dormir en tus piernas,
Porque son fuertes y perfectas,
Porque aguantan el trajín del día
Y aunque terminen cansadas
Son cálidas para guardar un poema como este.
Este poema quiere vivir en tu sonrisa,
Quiere brillar en cada palabra que digas,
Que le hables de mi, de estas locuras,
Quiere sentir lo que sientes cuando dices mi nombre
Este poema te busca, sigue huérfano de amor.
Este poema no existe aún, quiere tu suspiro.
Este poema apenas y respira, necesita un te amo.
Este poema esta trasnochado y solo duerme en tu espalda.
Y se queda quieto esperando tu abrazo.
Este poema llora si lo ignoras.
Este poema quiere un besos y su eco después de eso.
Este poema sigue huérfano y apunto de morir;
Toma un momento y déjalo vivir,
Toma un segundo solamente,
Dale la palmada en la espalda para que respire,
Dale respiración de boca a corazón.
Es sencillo darle sentido de vida.
Este poema quiere escucharte,
Dilo en voz alta, ahora mismo…
Di mi nombre, dilo sin temores,
Ahora agrega un «te amo».
Suspira, mi amor.
Este poema tiene vida, lo abrazaste;
¿Sientes sus latidos?,
¿Sientes su frecuencia cardíaca?,
Tienen el mismo ritmo que el tuyo,
Ahora está en tu corazón…
No lo dejes morir.
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